"Una espera protegida y controlada: una vez elaborado el pincho, deberá vigilarse el tiempo y las condiciones hasta su consumo. La cultura del pincho, tan arraigada en determinadas regiones, no está reñida con las exigencias sanitarias. Las vitrinas, bien protectoras o refrigeradas para colocar en su interior los pinchos, garantizarán que no caiga nada sobre estos y que se mantengan a una temperatura de conservación adecuada en el caso de refrigeración. Es imprescindible que sean de fácil limpieza y desinfección y que tengan lector de temperatura. Algunas tapas se elaboran en el momento, lo que implica menor riesgo, y otras se calientan. En este último caso, una temperatura adecuada será una garantía sanitaria".
sábado, 28 de febrero de 2015
martes, 24 de febrero de 2015
Ya es primavera, desde hace varias semanas. Hoy han empezado a poner flores nuevas en el perro del museo.
Los virus, ya han cambiado de bando, y se baten ahora con los últimos de la gripe.
Hay días, que llueve y sale el sol, otros que sale el sol y llueve y el cielo recuerda los azules de Vincent y de Goya.
Hay gritos y risas en el parque, y jovenes que se acurrucan.
Es primavera, desde hace varias semanas.
Los inmigrantes como racimos de esperanzas colgados en la verja.
Ya veo las primeras mujere con puñetazos en la cara, como violetas.
Los inmigrantes sin tarjeta sanitaria, los detenidos , custodiados con esposas sin estar casados .
Recuerdo el invierno de espaldas, hace unos días, con su sombra larga de color rosado , llorando hielos .
Es todo verdad, cuando la esperanza de la luz de la noche, más relumbra.
Los virus, ya han cambiado de bando, y se baten ahora con los últimos de la gripe.
Hay días, que llueve y sale el sol, otros que sale el sol y llueve y el cielo recuerda los azules de Vincent y de Goya.
Hay gritos y risas en el parque, y jovenes que se acurrucan.
Es primavera, desde hace varias semanas.
Los inmigrantes como racimos de esperanzas colgados en la verja.
Ya veo las primeras mujere con puñetazos en la cara, como violetas.
Los inmigrantes sin tarjeta sanitaria, los detenidos , custodiados con esposas sin estar casados .
Recuerdo el invierno de espaldas, hace unos días, con su sombra larga de color rosado , llorando hielos .
Es todo verdad, cuando la esperanza de la luz de la noche, más relumbra.
martes, 17 de febrero de 2015
viernes, 13 de febrero de 2015
Invisibles
Estos pisos, saloncitos, llenos de bolsas de plástico ,amontonadas.
Un gato, sentado como rey, en la sillla más caliente.
Estos ciudadanos, ahora se llaman así, con pequeñas pensiones, pequeñas comidas , pero obesos. ¿Cómo podían engordar tanto con tan poco?, creo que era porque apenas se movían, no salían a la calle por vergüeza. Respiran despacio, laten lentamente.
Sólo los médicos accedemos a darles una llamarada de realidad exterior, para recordarles que tienen que cuidarse, tomando esto, quitando aquello.
Las Asistentas Sociales, sepultadas por papeles y papeles, no les visitan.
Invisibles.
Un gato, sentado como rey, en la sillla más caliente.
Estos ciudadanos, ahora se llaman así, con pequeñas pensiones, pequeñas comidas , pero obesos. ¿Cómo podían engordar tanto con tan poco?, creo que era porque apenas se movían, no salían a la calle por vergüeza. Respiran despacio, laten lentamente.
Sólo los médicos accedemos a darles una llamarada de realidad exterior, para recordarles que tienen que cuidarse, tomando esto, quitando aquello.
Las Asistentas Sociales, sepultadas por papeles y papeles, no les visitan.
Invisibles.
martes, 10 de febrero de 2015
Le perfum
Me cantaré en la silla, hasta quedar dormida.
Sin intentar llegar a al Luna, ni pintarla de azul.
¿No me digas que no has soñado lo mismo?: todos los delirios de todo tipo en todos los colores.
Pobre de mí, me desperté, recordando mi primer amor ,
mi primer perfume de Mitsouko, me quería y me deseaba entre tus sábanas, nadie se lo cree , ni mi gato.
Parece que nuestro amor tiene una salud de hierro, pero ya le han visto un poco de inconveniente esos duendes que andan descalzos. !Qué van a saber ,ellos!, digo yo, si andan de cueva en cueva, medio ciegos.
!Que felicidad, estando en mi recuerdo!
Alrededor de tu cintura, sin cerrar los ojos, dejando este mundo.
Sin intentar llegar a al Luna, ni pintarla de azul.
¿No me digas que no has soñado lo mismo?: todos los delirios de todo tipo en todos los colores.
Pobre de mí, me desperté, recordando mi primer amor ,
mi primer perfume de Mitsouko, me quería y me deseaba entre tus sábanas, nadie se lo cree , ni mi gato.
Parece que nuestro amor tiene una salud de hierro, pero ya le han visto un poco de inconveniente esos duendes que andan descalzos. !Qué van a saber ,ellos!, digo yo, si andan de cueva en cueva, medio ciegos.
!Que felicidad, estando en mi recuerdo!
Alrededor de tu cintura, sin cerrar los ojos, dejando este mundo.
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