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Nos abrió la vecina el portal, porque el portero automático no funcionaba.
La vecina nos dijo, que Manuela, no había hecho más que vomitar toda la noche,le había preparado zumo de limón con bicarbonato y lo había echado también.
La vecina fue a buscar las medicinas de la abuela a la Farmacia de Guardia
La vecina no hacía más que llorar, conocía a la abuela desde hacía 40 años:" Toda la vida, puerta con puerta .Sabía que le iba a pasar algo estando yo, de vacaciones".
Encontraron a la abuela muerta y el nieto llamó a la vecina.
La hija de la vecina,detrás de su madre, la acariciaba el hombro con ternura, en su cara ya estaba dibujándose otra vecina.
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