jueves, 10 de octubre de 2013

Una receta en la botella

Señor Darpón:
Veo al marido de Teresa.
Me comenta que el nuevo tratamiento con parches para el dolor, un derivado de morfina,y que a pesar de todas las medidas que le habíamos indicado, para controlarlo, le produce estreñimiento.
"No te preocupes, te hago una receta de unos sobres, para solucionarlo".
Estos sobres no están financiados, salvo situaciones excepcionales.
Teresa, es una enferma terminal, afectada de un cáncer de útero en progresión, no subsidiario de tratamiento, tiene afectación de múltiples órganos y metástasis.
Me pongo  a hacer la receta con el ordenador, y me indica este, que este producto en concreto necesita el visado de inspección y que exponga las razones para pedirlo. Me parece una locura, tener que andar justificando las razones de recetar un producto como este ,en un enfermo terminal, sabiendo que la mayoría en esta fase , están tomando morfina, y esta produce estreñimiento sí o sí.
Al final de la mañana, miro si inspección ha dado el visto bueno al medicamento para el estreñimiento de Teresa, cual es mi sorpresa que este medicamento es denegado por inspección.
Preguntamos a la inspectora y echa balones fuera, son órdenes de arriba..."ya lo siento, tendrán que pagarlo"
El marido de Teresa lo ha comprado en la Farmacia, 2 euros y pico.
Espero, Señor Darpón, que si tengo la suerte de que esta receta en botella, que le escribo ahora,  llegue a una playa cercana, a su despacho, vaya usted y lo lea  y así un día se pueda considerar no excepcional, a quién le corresponda, que en los enfermos terminales, este tipo de productos  pueda  ser financiado, sin problemas, en nuestro sistema de Farmacia de Osakidetza, más que nada para que no sintamos vergüenza , sienta vergüenza, de ser uno de los profesionales de este Sistema de Salud.
Gracias de antemano, Sr Darpón.
PS:
Publicado en Irekia, esperando contestación.Ya os diré.

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