domingo, 12 de julio de 2009


Libros de cuando eramos pequeñas, indios y vaqueros de plástico de los que se vendían en sobres de papel ,muñecas que les faltan ojo, postales antiguas, cuentos, recortables..en el rastro los vendedores no escatiman el precio al recuerdo: un caballo negro de plástico 3 euros, un indio con sus plumas 12 euros,o una caja de pastillas Juanolas antiguas por 20.
No sé que encontramos de gusto y regusto en comprar estos objetos de la niñez.
Psicoanálisis de baratillo; recuerdos pegados a objetos, como los sellos a las cartas.
Recuerdos que nos llegan al galope, agridulces, intensos, que acaban acariciando con ternura a una niña cada vez más pequeña, más perdida...en recuerdos apenas esbozados, inconclusos, llamaradas, o chispazos que no consiguen crear ni un pequeño relato.

3 comentarios:

el jukebox dijo...

Lo peor es la ofensiva revival de la publicidad contra la gente de nuestra edad: que si 'Verano azul' por aquí, 'La abeja Maya' por allá, Richard Clayderman, Viky el Vikingo y su señora madre. Qué asco de gente, por favor.

Saludos

sonia dijo...

Me gustaba Viky....pero el que más una serie de Hanna Barbera que se llamaba:"Don gato y su pandilla"
es que soy viejales, Juke...;-)

el jukebox dijo...

Pues entonces yo también, porque recuerdo al tal Don Gato. De todas formas, me gustaban más los dibujos de la Warner, que son los que acababan con lo del That's all folks!, y todo eso.

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