domingo, 15 de febrero de 2009


La mayor fortuna apenas entra en una mano.
El mayor lujo, un instante de felicidad.
El silencio, las ideas, el cariño, la amistad, quedan cerca sin apenas tocarnos.
Manos desnudas.
Ballet de las cosas importantes, apenas tan pequeñas, tan trasparentes, como velos y saltos en el aire.
La riqueza no es del capital.
Mujeres veladas: el silencio, las ideas, el cariño, la amistad.

4 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...

"Lo de la vida interior es un lujo de los que comemos cada dia". Y también es lo que comemos cada día. O al menos deberíamos.
Primo Levi contaba cómo en Auschwitz, una de las cosas que le daban vidilla era recitarse a sí mismo los versos de Dante en la Divina Comedia para recordar que, aunque comiera lo que hasta un animal rechazaría, seguía siendo un hombre.
No obstante, creo que sé lo que quieres decir y más o menos lo comparto.

sonia dijo...

Bueno, hablo de las palabras: fortuna, lujo, capital..es en términos muy grandes ¿sí?
Todo eso de los grandes capitales, intereses geoestratégicos, G7 y demás, todo eso no entra apenas en una mano..donde esas mujeres veladas, que se esconden, etéreas, trasparentes, como volutas de cigarrillo(así la foto)son las más importantes.
Me parece estupendo el ejemplo de juke, y el tuyo Io, estamos de acuerdo que sin poder comer o estando en coma no hay vida para hacer esas disquisiciones ¿ o sí?
Es aveces que buscamos la mirada en los que sufren, sólo para ofrecerles la nuestra diciéndoles: "yo también, contigo"..
Más o menos ya sabeís.

Contribuyentes